Debía escribir un artículo acerca de lo que el COVID representa para las personas, pero luego de bucear entre mares de información e impresiones personales del entorno más cercano, el resultado ha sido tan desconcertante como abrumador. Puede resultar sorprendente el grado de inconsistencia en lo que las personas expresan tanto con sus palabras como con sus conductas, al punto que lo patológico parece ser lo normal.
La necesidad de contacto social que muchas personas demandan, no parece reconocer al otro como persona sino más bien como objeto al servicio del propio ego. Finalmente solo atino a quedarme con un título que resume quizás la más dramática consecuencia de aquella desmesura y una gran hoja en blanco... atestada de silencios.Mario Caccia
Comentar con: